¿Qué te costaba, Ricardo?

Antes de leer esta entrada, te invito a conocer mi postura para este proceso electoral.

Con cada día que pasa de esta jornada electoral, sólo se me viene una pregunta a la mente, más allá de ¿quien ganará la elección? o ¿por quién votar? me pregunto, ¿qué te costaba, Ricardo?

Entiendo perfectamente tus ganas de llegar a ser Presidente, ¿qué mexicano nunca se ha imaginado en el puesto más alto y honroso de la nación?

También entiendo lo sucia que es la política, no me espanta; lo que no logro entender es por qué llegaste como lo hiciste, y ni siquiera disimular. ¿Qué te costaba respetar la tradición democrática del partido que dices querer y representar?

¿En verdad era necesario cerrarle el paso a todos tus compañeros de partido? ¿En serio tenías que cortar de tajo, usando tu poder como presidente del partido, las aspiraciones de Margarita Zavala, Rafael Moreno Valle, Juan Carlos Romero Hicks y Luis Ernesto Derbez?

Hablas del Frente que formaste como una oportunidad de tener el primer gobierno de coalición en la historia de México, y desde la retórica suena fantástico; pero, sin tomar en cuenta los muy seguros choques ideológicos que tendrá el Frente si llega al poder, esta coalición parece más una alianza política para tu servicio que para el de México, tan así que no es casual que la Presidenta del PRD sea la actual candidata a la Jefatura de Gobierno de la Ciudad de México y tú el candidato a la Presidencia de la República. Pero a Barrales no le reclamo nada, ella por lo menos se tomó la molestia de competir contra José Armando Ahued y Salomón Chertorivski, o por lo menos hacer creer que eso fue lo que sucedió.

Tratas de convencerme que yo, como joven mexicano, vote por ti porque también eres joven. Yo encantado de que los jóvenes estemos cada vez más involucrados en la política de nuestro país; pero creo que la forma en la que llegaste hasta donde estás, sin importar tu edad, no me habla bien de ti, deja tú como joven, como líder y como ser humano. Además, estás rodeado de personas viejas que ya estuvieron en el Gobierno y no pudieron con su deber.

Un ejemplo de eso es Jorge Castañeda, quien fue el Secretario de Relaciones Exteriores durante la primera mitad del sexenio de Vicente Fox, y quien por cierto renuncio al cargo al no poder tomar una postura para México respecto a la guerra contra Irak. Si en aquel entonces tuvo miedo de enfurecer al Presidente Bush, ¿qué te hace creer que hará un buen trabajo frente a Trump? Y mira que George W. Bush no basó su campaña en contra nuestra.

Durante la precampaña y la campaña tú y tu amigo Damián Zepeda a quien pusiste en la Presidencia del PAN, se la han pasado repitiendo hasta el cansancio el mismo discurso contra el PRI y Obrador y yo estoy muy de acuerdo en eso; el PRI ha cometido muchos errores y desde mi punto de vista Obrador no le haría bien al país, pero del PAN que de verdad valía la pena y que pudo ganarles a los dos incluso sin coalición, hoy ya no queda ni la sombra.

Cómo me hubiera gustado que mi primer voto hubiera sido para el PAN de los tiempos de Manuel Clouthier o de Felipe Calderón, y ese PAN estaba vivo hasta que te encargaste de destruirlo por dentro para tu propio beneficio.

Y no sólo aplastaste a aquellos panistas que tienen por mucho más experiencia y «colmillo» en la política que tú, también le cerraste el paso a Miguel Ángel Mancera, quien a pesar de que su gestión como Jefe de Gobierno de la CDMX decepcionó a muchos, me hubiera gustado verlo como candidato, porque tiene el carisma y el ingenio para confrontarse con otros políticos.

No dudo que para tu corta edad seas alguien bastante preparado, sin duda debiste ser un alumno brillante en la Universidad, tanto que pareces más un congresista académico que un candidato, pero se requiere mucho más que eso para gobernar una nación. Aunque en la teoría sumar al partido opositor al PRI por historia y excelencia con el partido gobernante de la capital de las últimas dos décadas fue una jugada política interesante, lo cierto es que el Frente no tiene nada que ofrecer más allá de la envoltura.

Como te lo dijo Denise Maerker en Tercer Grado, tienes a un PAN dividido, un PRD en los huesos y un Movimiento Ciudadano en donde la figura política más fuerte decidió no unirse al Frente para contender por la gubernatura de Jalisco.

Si ganas, ¿con qué gente trabajarás realmente?
Si pierdes, ¿con quién te irás?

El punto principal, que creo que tanto tú como tus seguidores se han empeñado en mantener tu candidatura, es el «voto útil».

En el 2000, el voto útil le favoreció enormemente a Vicente Fox, quizás no era un candidato relativamente excepcional en cuestión de preparación, sobre todo si la competencia era un acartonado Francisco Labastida y un añejo Cuauhtémoc Cárdenas, pero Fox le daba una frescura divertida a la contienda después de los 70 años del régimen disciplinario priista, régimen que era el único enemigo a vencer.

Que hoy se vuelva a dar un voto útil tan grande resulta muy difícil, en aquel entonces era o votas por el PAN o vuelve a ganar el PRI, pero era un PAN 100% unido, hoy las cosas son distintas.

Tu base más fuerte para que vote por ti es que use el voto útil, pero más allá de eso, ¿qué cualidades tienes para ser Presidente? Después de el camino que recorriste para llegar a la candidatura. Para mí, una persona que es capaz de aplastar a quien sea con tal de lograr sus propios objetivos, NO tiene el perfil para ser un buen Presidente.

No me cabe la menor duda de que eres el divisor de la elección presidencial. Si hubieras dejado contender a aquellos panistas que aspiraban a ocupar limpiamente tu lugar y hubieras cumplido el papel que te correspondía, o incluso participar democráticamente en una elección interna, y si hubieras sido elegido así, como en el verdadero panismo siempre ocurrió, hoy estaría decidido a votar por ti y cumplir el sueño que desde pequeño tenía, que mi primer voto sería para el PAN; pero decidiste ensuciarte las manos y destruir al partido que juraste procurar.

Eres bastante joven, estoy seguro que de haber hecho las cosas como se solían hacer en el PAN, habría un o una panista en Los Pinos en 2018 y que su sexenio y desempeño te habría permitido construir un mejor curriculum político para prepararte a competir en 2024, sin tanto riesgo… Si pierdes ahora, ¿qué pasará con tu carrera política después de la fama que te has creado?

Si ganas la elección, ruego que a México le vaya bien, y que de verdad todas las razones por las que actuaste como lo hiciste hayan sido únicamente por el bienestar de México (aunque lo dudo), que sepas rodearte de la gente correcta para tener un sexenio en paz para el país, y que aún quede para gobernar una parte del auténtico PAN que ya se nos fue.

Si gana Meade, no te sorprendas, aquellos simpatizantes de Margarita Zavala que al principio desestimaste no tienen ni ganas de votar por ti, por las razones que ya escribí. Meade lleva más la fiesta en paz con Felipe Calderón, tuvieron una buena relación de Secretario – Jefe durante su sexenio.

Si gana Obrador, la culpa no será de Margarita Zavala, ni de José Antonio Meade, ni de «El Bronco», ni de Peña Nieto, ni de Moreno Valle, Romero Hicks, Derbez, Mancera, Barrales, ni de tus asesores y colaboradores, ni mucho menos de quienes no voten por ti.

¿Qué te costaba hacer las cosas como un verdadero panista, Ricardo?

 

 

José Andrés ha escrito en La Litera.